dc.description.abstract | Perdóname, Iguala es un proyecto de larga duración que busca problematizar y evidenciar el clima de hiperviolencia en Iguala de la Independencia, Guerrero, México, un fenómeno profundamente ligado a los conflictos del narcotráfico. En este contexto de incertidumbre —descrito así por el expresidente municipal de la entidad—, la estetización de la violencia y de las imágenes que esta genera se ha vuelto inevitable. Con este proyecto se propone cuestionar dicho proceso, explorando cómo la experiencia estética de la violencia se empobrece y domestica a través de su representación visual y sonora.
El detonante de esta investigación surge a partir de la observación de la constante y repetitiva exposición de notas rojas entre los habitantes de Iguala, producidas y consumidas localmente. Estas imágenes, entendidas como imágenes pobres por su carácter degradado, son intervenidas por medio de su reproducción y recirculación, transformándose en un acto crítico y reflexivo, y cuestionando su valor, calidad, cualidad y lugar.
El proyecto se desarrolla a partir de memorias e imaginarios colectivos archivados en formatos auditivos y visuales, materializado en una instalación integrada por dos piezas: la primera compuesta por fotocopias de imágenes hiperviolentas, que exploran el olvido y su borramiento en el recuerdo común; y la segunda, construida a partir de sensores de movimiento que activa la reproducción de perifoneos que ilustran la inserción de la narcoviolencia en el lugar de lo común, lo cotidiano, e incluso, lo doméstico. | spa |